El Sombrero Panamá de Signes

Hay mucho escrito ya, sobre los mal llamados sombreros de Panamá. Su procedencia, su fibra, sus cualidades…..

Vamos a intentar explicar cómo conocer y diferenciar, por lo menos, las calidades más genéricas, en que fijarnos. Y comprender por qué la diferencia de precios y como comprar el más adecuado a nuestro gusto.

Estamos hablando siempre de la misma fibra, la misma planta la paja toquilla (Carludovica_palmata). Esta es tejida a mano y dependiendo de la finura de la fibra, queda más fino y más ligero el sombrero. Cuanto más fino, se le denomina mayor graduación, (4º-8º-16º ……)

Pero existen dos tipos más genéricos de trenzado, el Brisa y el Cuenca. El tejido cuenca, está hecho de dos en dos pasadas, quedando con un dibujo de espiga. Mientras que el tejido Brisa las pasadas son de una en una, dibujando un aspecto de grano de arroz.

Cada uno tiene sus particularidades, defectos y limitaciones. Por ejemplo, en el tejido cuenca tendremos que tener en cuenta que siempre será más pesado, pues las pasadas en dos en dos, hace que el sombrero sea el doble de grueso que el tejido brisa (de la misma graduación). Pero será más resistente y los defectos del tejido siempre serán mejor disimulados.

Mientras que en el tejido Brisa,  siendo el mismo grosor de paja, siempre tendrá un aspecto de finura y ligereza mayor. Por esto suele ser el más comercializado en precios medios. Pero tiene el defecto de que los fallos son más apreciables, algo que ha permitido a otras fibras tejidas a máquina, tomar el mercado imitando y usando también el nombre de sombrero de Panamá.

Hay que ser exigente cuando compramos, pero también tener en cuenta que son tejidos a mano y como artesanía los debemos de tomar, con sus defectos. Solo así podremos disfrutar de las prestaciones de estos sombreros. Frescura, comodidad, maneabilidad…..

Con estas dos diferencias de tejido, y conociendo que cada uno permite tiene sus limitaciones, tenemos que decir que para los grados más altos, también cada cual tiene su particularidad.

Por ejemplo, los verdaderos Montecristi son tejidos en el sistema Cuenca, pues a partir de grados 14º no es posible tejer un sombrero Brisa, pues la finura de la paja no se mantiene tejiendo de una en una pasada. Mientras que en el tejido cuenca son tejidos Montecristi de hasta grado 30º. Eso sí, con precios que rondan los 600Eur.

Para los más mortales, Signes ha desarrollado un sombrero Brisa 14º, algo que en el mercado Europeo no se estaba comercializando, con unas características de ligereza, comodidad y maneabilidad inmejorables. Con un acabado, hecho en el Norte de Alicante, manteniendo sus cualidades,  mejorando su resistencia a las humedades y al uso y  aportando un diseño innovador admirado en toda Europa.

Otra pregunta muy recurrente es la referente al mejor mantenimiento del sombrero. Signes recomienda algo tan sencillo como usarlo lo máximo posible y no guardarlo nunca húmedo.

Sombreros Signes, 50 años de experiencia.

Sin perder de vista las técnicas artesanales tradicionales del Mediterráneo, Signes ha conquistado los mercados internacionales gracias a sus excelentes acabados y materias primas.

Volver al pasado es una forma de mirar hacia el futuro. En Signes son conscientes de esto, como una empresa donde la innovación nunca ha estado reñida con un respeto firme por la artesanía tradicional valenciana. Lanzada a finales de los años sesenta por José Signes Pedrós, hoy la compañía se encuentra a la vanguardia de la más alta calidad en la fabricación internacional de sombreros, gracias a su fuerte carácter artesanal y la excelencia en técnicas y acabados.

No hay otra manera de explicar el largo éxito que disfrutó Signes. Fundada en 1968, la empresa familiar de este año marca su 50 aniversario. Y no había mejor manera de celebrar que haber sido galardonado con la 'Medalla de oro por mérito en el lugar de trabajo' por la Asociación Europea de Economía y Competitividad. Este premio reconoce la excelencia en términos de calidad y éxito en las empresas europeas.

Un premio bien merecido que tiene en cuenta el viaje que ha llevado Signes Hats para llegar hasta aquí. Sus orígenes son humildes y están muy vinculados al crecimiento económico experimentado en la provincia de Alicante durante los años sesenta, gracias a su posición privilegiada como puerta de entrada a la península desde el Mediterráneo. José Signes Pedrós fundó su empresa en Gata de Gorgos, en el área de Cabo de San Antonio, un punto estratégico para varias rutas comerciales con los continentes europeo y americano.

A partir de ahí, con una buena dosis de perseverancia, trabajo duro e inteligencia, Signes gradualmente abrió el camino a sus métodos particulares de producción de sombreros. José Signes Pedrós estableció los pilares sobre los cuales se apoyaría la filosofía de la empresa: innovación y experimentación con nuevos materiales y tejidos, sin perder de vista los métodos locales tradicionales y el espíritu artesanal de producción. Durante los años siguientes, la familia Signes se apegará a esos mismos principios empresariales y progresará hacia la internalización de su empresa, llevando su nombre y sus magníficos sombreros a los cinco continentes.

Las piezas exclusivas, caracterizadas por la perfección de los acabados y el uso de materias primas sin paralelo, se utilizan para producir los magníficos sombreros de piel de la empresa. Junto con estos, algunos de los mejores incluyen sombreros de Panamá y los mejores Montecristi. Una brillante variedad de productos que combinan la esencia original de los talleres tradicionales de Alicante con los exigentes estándares de calidad del mercado internacional de la moda.

 Más información en: http://sombrerossignes.com/