Surf en el fin del mundo… y más allá
Surf en el fin del mundo… y más allá
Noticias viajes 22 Julio 2014 3028 hits
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- Categoría: Noticias viajes
- Publicado el 22 Julio 2014
- Escrito por Redacción
La Costa Vicentina, que asciende desde el extremo sudoeste de Algarve, en el Cabo de San Vicente y punta Sagres, por todo el litoral, alcanzando el Alentejo, es una de las costas más buscadas por sufers y bodyboarders de toda Europa. Aguas limpias y bravas, de temperatura agradable todo el año, playas alejadas del turismo y cielos despejados, son la mejor invitación para romper las olas en una de las costas más especiale de Europa.
Algarve es uno de los destinos más deseados por amantes del surf de toda Europa, que encuentran en la Costa Vicentina su preciado paraíso. Aguas limpias, con buena temperatura durante todo el año y cielos despejados son la mejor carta de presentación de las playas de la costa oeste de la región que, alejadas del turismo de masas, se suceden entre los acantilados, a lo largo de una de las costas consideradas entre las más especiales de Europa.
Subiendo desde Sagres hacia el Alentejo, la Costa Vicentina de Algarve es meca de los amantes del surf y el bodyboard, que encuentran en estas aguas salvajes de olas bravas rompiendo contra los promontorios rocosos el deseado tesoro que todos los amantes de la tabla buscan. Al amparo de “domingueros”, por su más difícil acceso, ofrecen escenarios de playa salvajes, únicos, inspiradores, mágicos, ideales para disfrutar rompiendo las olas de sol a sol.
Si hablamos de sol, obligado hacerlo del lugar donde el astro rey se pone de una forma especial: el Cabo de San Vicente. Este lugar que llamaron “el fin del mundo” (y no es para menos) en el Medievo, no es sólo el lugar de peregrinación de miles de curiosos deseosos de disfrutar al anochecer de esa inexplicable magia rojiza de la que todo el mundo habla, sino también un lugar generoso en magníficos paisajes propicios para la práctica del surf, que atraen a muchos aficionados.
Para ellos, en las proximidades del Cabo de San Vicente hay una visita obligada: la playa de Beliche. Situada en una amplia ensenada definida por la punta de Sagres y el Cabo de San Vicente, esta playa parece haber sido excavada en los acantilados altos y de colores cálidos. Ubicada en plena Reserva de la Biodiversidad, ofrece un paisaje único y numerosas plantas endémicas (con la prohibición terminante de cogerlas), así como unas aguas ideales para la práctica del surf y el bodyboard.
Al este del pueblo de Sagres, protegida de los vientos del oeste y sudoeste por la punta de Baleeira (donde se encuentra el puerto pesquero de Sagres), la playa de Martinhal es otra de las imprescindibles. Sus aguas son tranquilas e invitan a la práctica del surf y también del buceo. Para los aficionados a esto último, muy recomendable una visita subacuática a los islotes de naturaleza calcárea que se sitúan a lo largo de la playa, famosos por sus grutas submarinas.
Subiendo ya por la costa oeste, el concejo de Aljezur concentra algunas de las playas más salvajes de Algarve y más alejadas del turismo convencional. Un viaje obligado para quienes quieren disfrutar del mar en su estado natural.
Aquí, la playa de Arrifana ocupa el top one entre los surfers. Nace de una bonita ensenada en forma de concha, al custodio de escarpas en tonos negros, como la Pedra da Agulha, un enorme peñasco en el mar que se ha convertido en el símbolo de la costa soudoeste. Menos frecuentada, en una ensenada al sur de Aljezur, la playa de Vale Figueiras tiene gran belleza natural y es también una excelente opción para surfistas y bodyborders.
Subiendo un poco más al norte, la playa de Amado es otra de las grandes favoritas, donde se congregan surfistas de todo el mundo. De hecho, con su extenso arenal y gran oleaje, ostenta un lugar privilegiado entre las mejores de Europa para la práctica no sólo del sólo surf, también todo tipo de deportes acuáticos. Muy cerca se encuentra también la playa de Bordeira, igualmente reconocida.
Se suma a esta lista Carrapateira, en Aljezur, que fue incluida por la CNN en su lista de los 50 mejores lugares de todo el mundo para la práctica del surf. Según los autores, la playa, que ocupa el puesto 31, destaca por una izquierda fantástica, un gran acantilado, un ambiente tranquilo durante casi todo el año y olas de hasta tres metros con marea alta.
Ya en el extremo norte de la región, en Odeceixe, donde el Algarve comienza, hay varias playas pequeñas, escondidas en los acantilados rocosos, con buenos accesos, donde el surf es una forma de vida. G
La playa de Odeceixe es la que marca la frontera entre el Alentejo y Algarve, allá donde el pequeño río Ceixe desagua en medio del arenal. La playa se divide en dos zonas -la playa fluvial y la de mar-, con una fuerte ondulación del lado del océano, que atrae a muchos surfistas y bodyboarders deseosos de romper estas olas mitad alentejanas mitad algarvías.
La Costa Vicentina reúne excelentes condiciones para los que quieran iniciarse en este deporte, así como escuelas específicas de aprendizaje: www.algarvesurfschoolsassociation.com.
Más información www.visitalgarve.pt y www.algarvepromotion.pt