Quebec, Tras el verano... ¡el verano!
Quebec, Tras el verano... ¡el verano!
Noticias viajes 14 Septiembre 2012 6310 hits
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- Categoría: Noticias viajes
- Publicado el 14 Septiembre 2012
- Escrito por Redacción
Bosques que se inflaman de colores y un rebrote estival que los quebequenses llaman l’été des Indiens (y nosotros el veranillo de San Miguel): ¡aquí tienes dos buenas razones para descubrir Quebec en otoño! Los colores con los que se cubren los bosques quebequenses cuando llega el otoño no tienen nada que ver con este été indien, pero estos dos fenómenos climáticos tan distintos han acabado por confundirse en el espíritu del viajero y han dado lugar al mito de una estación mágica : el otoño de Quebec.
Vamos a explicarlo : después de las primeras heladas, que suelen llegar a comienzos de octubre, el tiempo se vuelve agradable, apacible, y esto puede durar varios días o varias semanas. En Quebec, a esta especie de vuelta del verano la llaman l’été des Indiens (literalmente, el verano de los indios), que gracias a una exitosa canción de los años setenta, se convirtió en l’été indien, o sea, el verano indio… Se tienen que dar condiciones muy precisas y particulares para que a este periodo de tiempo se le pueda llamar así : cielo despejado y temperaturas que superen las medias para esta época con más de 5ºC. Así, se pueden producir varios étés indiens durante un mismo año o… ninguno.
Y, ¿qué pintan los indios en todo este asunto? Los colonos europeos habían notado que los Amerindios aprovechaban estos días más templados para terminar de hacer las cosechas y cambiar de campamento, antes de la llegada del invierno. En el mismo periodo, por la disminución de horas de sol, los bosques se cubren de colores dorados, ocres y rojos. Un espectáculo deslumbrante que, este sí, se produce todos los años sin excepción y alcanza su apogeo durante la primera quincena del mes de octubre.
1- Celebrar los colores
Muchas ciudades y pueblos de Quebec organizan el Festival de los Colores. Unos lo enfocan sobre los deportes en la naturaleza, sobre todo en el senderismo, una actividad perfectamente adaptada a este periodo. Otros ponen el acento en el plano cultural. Entre los eventos que podemos encontrar en este aspecto están los Sueños de Otoño de Baie Saint-Paul, en el que durante diez días, pintores y escultores acuden a inmortalizar los magníficos paisajes de la región de Charlevoix. Los pueblos de Anse Saint-Jean y Petit-Saguenay, situados en la orilla del fiordo de Saguenay, acogen por su parte a una cuarentena de reconocidos artistas dentro de su Congreso de los Pueblos en Colores. Pero en todos los lados, como siempre en Quebec, se respira un ambiente con vivial, entusiasta y muy agradable.
www.revesdautomne.com(21-30 septiembre)
www.villagesencouleurs.com(5-8 octubre)
2- Golosinas otoñales
En los huertos de Quebec, la recolección de la manzana se lleva a cabo en septiembre. Muchos de ellos ofrecen a lugareños y visitantes las autorrecolecciones, una curiosa tradición muy popular, en la que cada uno se acerca a los campos y huertos y hace su propia cosecha. ¡Vamos, que en vez de comprar en el supermercado se hace directamente en el lugar donde nacen y crecen frutas y legumbres! También es en otoño cuando se pueden encontrar en los mercados los primeros arándanos agrios frescos y los deliciosos zumos que se elaboran con ellos, cargados de vitaminas. Si queremos conocer todo sobre esta fruta hay que ir al Centro de Interpretación del Arándano Agrio, en Saint-Louis de Blandford. Por otro lado, en la región de los Cantons-de-l’Est, durante dos fines de semana, el pato del Lago Brome es el protagonista en la cocina, junto con el jazz : los chefs realizan demostraciones culinarias y los restaurantes de Sutton y Knowlton ofrecen menús especiales con música en directo.
www.canneberge.qc.ca
www.canardenfête.ca (22-23 y 29-30 septiembre)
3- El regreso de las ocas blancas
Cada otoño, desde el Gran Norte, las ocas blancas (también llamadas ocas de las nieves) hacen una parada en las orillas del río Saint-Laurent antes de emprender el viaje hacia Carolina del Sur, donde pasan el invierno. Los humedales donde habitan, como Cap Tourmente, se han convertido en espacios protegidos en los que es posible observarlas junto a un guía naturalista. Montmagny, en la región de Chaudière- Appalaches, alberga un centro de interpretación de estas aves y organiza cada año el Festival de la Oca Blanca, donde se unen la observación ornitológica con la gastronomía.
También en esta época, la mayoría de las pourvoiries (antiguos refugios de cazadores convertidos en hoteles) organizan salidas al atardecer para observar al oso negro.
www.festivaldeloie.qc.ca (5-8 octubre)
Más información. www.bonjourquebec.com/es