Carnaval de Binche, "Siempre mas allá"

Nos acercamos a la época de la Cuaresma, con la llegada del mes de febrero comienzan a celebrarse los carnavales y en Foto-Viajes  os vamos a presentar   un carnaval no tan conocido internacionalmente pero no por ello menos original y llamativo, se trata del Carnaval de Binche (Bélgica), dónde sus habitantes ponen todo su empeño en prepararse durante meses para que todo salga bien. Este año se tiene lugar del 15 al 17 de febrero.

El Carnaval es una tradición pagana que se remonta a hace unos 5.000 años que permite, detrás del disfraz  y la máscara, dar rienda suelta a la imaginación y a la carne. Como decía los primeros rastros de este tipo de festividad se remontan a los sumerios que ya se disfrazaban y tapaban la cara, los egipcios celebraban festividades de este tipo en honor al toro Apis.

De ahí pasaron al Antiguo Imperio Romano en honor los dioses Baco y Saturno, con la misma finalidad pasando después a Europa desde donde se llevó a América  por los navegantes españoles y portugueses.

Durante mucho tiempo ha estado ligado a la religión cristiana como antesala a la Cuaresma, buscando liberarse de las carestías y restricciones que ésta suponía. El origen de la palabra Carnaval tiene varia teorías entre ellas que viene de carnavale “carnem levare” quitar la carne, relacionado con la prohibición de la Cuaresma.

Esta tradición se ha difundido por todo el mundo así se ha convertido en muchos lugares en auténticos reclamos turísticos, ¿quién no ha oído hablar del exuberante desfile de Río de Janeiro, el elegante carnaval de Venecia, las chirigotas de Cádiz o el Carnaval de Canarias?.

En el caso del Carnaval de Binche se remonta a la Edad Media, cuenta la leyenda que la hija de Felipe el Hermoso, María de Hungría (entonces Dama de Binche), organizó  unas ostentosas fiestas con banquetes, bailes, disfraces en honor a su hermano Carlos I de España y su sobrino Felipe II.

Los asistentes a esta celebración festejaron la llegada de sus reales visitantes y coincidió con la llegada de una misión de exploradores españoles de América por lo que los ciudadanos de la corte española iban disfrazados de Incas, los “gil” apellido muy conocido entre los españoles, que darían lugar a los actuales gilles

Del origen pagano de la festividad se deduce un significado meramente de tránsito en el paso de las estaciones, una llamada a la primavera (de ahí la ofrenda de las naranjas y los ramos de mimosas que se distribuyen por todos los rincones) y un sentimiento de querer dejar a tras al invierno

Como os digo en Binche durante 3 días tiene lugar el carnaval y este año conmemora el 11º aniversario de su proclamación como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.

Los trabajos comienza meses antes, con la preparación de la casa, el alquiler de los trajes y la organización, pero una vez que llega la semana, los eventos comienzan el domingo donde ya desde por la mañana la gente sale a la calle disfrazada animados por los tambores, las violas, flautas, órganillos y trompetas, disfrazados por la ciudad.

El lunes “Lundi Gras” es el día dedicado a los niños que van apareciendo por grupos con disfraces libres y vayas por donde vayas te los vas encontrando. Acaban concentrándose en la Grand-Place y allí toda la mañana juegan y se tiran confeti a sacos, toda la plaza está cubierta de papelillos, serpentinas y se convierte en una auténtica lluvia multicolor. Mientras los niños juegan, los padres viven en la calle la fiesta y entran y salen a los diferentes, bares, restaurantes y pubs que rodean la plaza y las calles colindantes que durante todo el día están abiertos, sirviendo bebidas y amenizando con música.

Por la tarde todos se concentran de nuevo en la plaza donde se organiza la Rondeau de l`amitié (el corro de la amistad), un gran corro donde los niños disfrazados van danzando alrededor de la plaza agarrados de la mano y los músicos con los tambores y violas animan a continuar bailando. Finalmente se dirigen a la estación donde se tiran fuegos artificiales.

La fiesta grande se reserva para el martes “Mardi Gras” comienza desde  el Alba, a las 3 o 4 de la madrugada, lo que se llama l´abillage, en el que los Gilles comienzan a prepararse con todo un protocolo que sus mujeres siguen al pie de la letra y que se han ido transmitiendo de generación en generación.

Comienzan los preparativos, en primer lugar ponen mesas con bebidas (normalmente Champagne) y comida, bollería aunque también son tradicionales las ostras. Después empiezan a vestir al Gille que llevará bastante tiempo.

Se ponen los pantalones de color verde caqui con dibujos cosidos de leones y corona escudo en rojo, amarillo y negro, una camisa blanca y unos patucos que cubren los pies antes de ponerse los grandes zuecos de madera que han sido fabricados manualmente en alguna de las casas de artesanos de la zona y con los que danzarán durante todo el día.

Posteriormente se coloca una gran casaca del mismo color que el pantalón y con los mismos ornamentos. La tarea de la mujer ahora se complica puesto que tienen que rellenar todo el interior por delante y por detrás de paja que irá poco a poco retorciendo e introduciendo hasta que finalmente queda todo un tronco fornido y compacto.

Una vez vestido se coloca una cadena de cencerros en la cintura a modo de cinturón y se pone uno más grande en el centro del pecho. Después se coloca un gorro blanco y un pañuelo alrededor de la cabeza que guarda todo el pelo y únicamente deja al descubierto la cara que posteriormente será cubierta por la máscara y por último se colocan los zuecos.

Cuando todo este protocolo finaliza el ambiente se relaja y ya solo queda esperar, puesto que los compañeros de la misma sociedad vendrán a buscarle a son de tambores flauta y clarinete.

Cuando se les comienza a oír salen a recibirles, realizan el baile tradicional en la puerta de la casa y una vez terminado todos pasan a saludarse, tomar algo, comer, beber y charlar amistosamente durante un rato hasta que salen de nuevo y van a la casa del siguiente Gille para recogerle y repetir el mismo proceso.

Así van pasando la mañana hasta que  al alba se dirigen a la Estación donde se congregan con el resto de las sociedades y donde las mujeres les hacen entrega de la vistosa máscara.

Desde ese momento todos con ella puesta desfilarán juntos por las calles como un todo en uno, no se diferencian puesto que van exactamente iguales y con la máscara puesta.

De allí van a la Grand-Place donde el Alcalde estará esperando en el Ayuntamiento. Les va recibiendo una a una todas las sociedades que van pasando con el mismo protocolo. El Alcalde pronuncia unas palabras y hace entrega de una serie de medallas a los miembros más destacados, éstos salen y entran los siguientes.

Mientras, fuera se vive un ambiente festivo con los Gilles bailando y el público disfrutando por las calles y en la plaza.

Esto sigue así hasta medio día cuando regresan a sus casas a comer y descansar y a prepararse porque a las 15:00 deben estar de nuevo concentrados al comienzo del recorrido del Gran Desfile de Carnaval.

Poco a poco se concentran, van llegando de todas partes y van colocando por orden. La gente abarrota las calles situados ambos lados detrás de las vallas de protección y la expectación va aumentando por momentos. Parten del cruce de Battignies el cortejo atraviesa la Avenida Charles Deliège para finalizar en la Grand-Place

La policía a caballo escolta la salida del desfile luego una fila de policías y posteriormente los niños por grupos de  Paysans, Pierrots, Arlequines, van pasando animados y jaleados por sus bandas musicales.

Todos los personajes del carnaval van provistos de unos cestos en los que llevan naranjas que lanzan al público como ofrenda. Los lanzamientos deben ser en forma de parábola para que se puedan coger con más facilidad pero, como os podéis imaginar, no siempre ocurre esto y por supuesto a lo largo del desfile vas viendo a algunos de los personajes, sobre todo alguno de los niños, lanzándolas con una trayectoria más lineal y sobre todo con bastante fuerza, es una fiesta  muy divertida en la que participan tanto los integrantes del desfile como el público .que les increpa pidiéndoles que lancen más naranjas.

Poco a poco van pasando hasta que finalmente llegan los Gilles engalanados con sus trajes y ahora con sus elegantes y esbeltas plumas de avestruz que llevan en sus cabezas sujetas con un gorro y que pueden pesar unos 3 kg, llega el momento culminante del desfile.

Todo un mar de plumas se despliega por las calles y si hay suerte y no llueve podrán mantenerlas puestas durante todo el desfile. Las plumas de avestruz son muy delicadas y deben mantenerlas intactas por lo que en caso de lluvia se las quitan rápidamente las envuelven en plástico y las retiran para no deteriorarlas.

Una vez que llegan a la Gran Place forman una enorme “rondeau” todos agarrados de las manos un gran corro siguen danzando y todos los músicos que han participado se unen en una sola orquesta,  en el centro animando el ambiente.

Por la tarde repiten el recorrido pero esta vez a la luz de los pequeños fuegos ahora los gilles no llevan sus plumas, vuelven a concentrarse en la Grand Place y la fiesta llega apoteosis final a las 21:30h con el lanzamiento de los fuegos artificiales que concluyen así el carnaval con el grito de “Pus Oultre” el famoso lema de Carlos V que significa “siempre más allá”.

Como ves todo un espectáculo a si que la próxima vez que estés planteando disfrutar de un carnaval incluye en tu lista la posibilidad de asistir a uno diferente mejor dicho único “El carnaval de Binche”, no te arrepentirás.

Más información: http://www.carnavaldebinche.be/program-of-the-shrovedays.html