50 años de la llegada del Hombre a la Luna

Este mes de Julio se celebra el 50 aniversario de la llegada del Hombre a la Luna, para celebrarlo hemos visitado Cabo Kennedy, el lugar donde comenzó la aventura espacial.

El 16 de Julio de 1969 despegaba desde la rampa de lanzamiento de Cabo Kennedy, en Florida, el Cohete Saturno V, transportando la Misión número 11 del proyecto Apollo.

En el cohete los astronautas  Neil A. Armstrong, Comandante de la Misión, Michael Collins, piloto de la nave Columbia y Edwin E. “Buzz” Aldrin Jr., piloto del Módulo Lunar; viajaban a bordo del Apollo XI, y después de 102 horas y 45 minutos, el 20 de Julio de 1969, el modulo lunar Eagle con Armstrong y Aldrán alunizaron en la luna, consiguiendo uno de los más importantes hitos de la historia de la exploración espacial y  de la historia moderna, por primera vez el hombre había llegado a la luna.

Nosotros no hemos podido ir a la luna, pero nos hemos acercado a Cabo Kennedy y conocer en primera persona el lugar del lanzamiento de las Misiones Apollo, visitar y fotografiar las diferentes instalaciones de la NASA, desde las rampas de lanzamiento, la plataforma donde se transportaban los cohetes Saturno V, y las históricas edificaciones donde se escribió la historia de la exploración espacial.

Uno los mayores atractivos de Florida es sin duda el Kennedy Space Center (KSC), el lugar desde donde se inició la historia de la exploración del espacio por parte de Estados Unidos. Impulsado por el presidente Kennedy, es un complejo que fue levantado por la NASA en 1962 y que ha servido para el lanzamiento de vehículos espaciales, además de actuar como centro operativo de la agencia espacial norteamericana.

Desde aquí se lanzaron, por ejemplo, los cohetes de la serie Saturno V, en los años sesenta; los Titan y Apolo, en los setenta, y también se puso en órbita la estación orbital Skylab.

Hoy es algo más que una sede de la NASA, dado que funciona como un parque temático sobre la exploración del espacio verdaderamente único. Situado a tan solo 75 kilómetros de Orlando, y cerca de la zona militar de Cabo Cañaveral, solamente se necesitan 45 minutos para llegar hasta allí en automóvil.

Las instalaciones se ubican a medio camino entre Miami y Jacksonville, con una superficie total de 567 kilómetros cuadrados, y alrededor de unas 17.000 personas trabajando en el lugar.

El KSC es el destino turístico más deseado de Florida. Sus atractivos se centran en numerosos museos y espacios expositivos que cuentan diversos aspectos de la conquista del espacio, dos cines Imax, varios teatros y numerosos servicios de atención al visitante.

Todo ello complementado por un servicio de autobuses turísticos que permiten visitar también algunas zonas operativas de la NASA, que están restringidas al público.

El KSC continúa siendo importante para la NASA, a pesar de que ésta tiene desperdigados en otros puntos de Florida (la estación militar de Cabo Cañaveral) y de Estados Unidos (Houston) otras sedes. Por ejemplo desde el KSC despegaban los transbordadores espaciales, y se sitúa también el llamado “Complejo de lanzamiento 39” que dirige los lanzamientos espaciales, sin olvidar que hay diversas instalaciones de apoyo del centro espacial, así como oficinas de administración.

¿Como es la experiencia de visitar el KSC? Extraordinaria, sin duda. Ya solo pasada la taquilla de la entrada principal, al visitante se le presentan múltiples alternativas. Por ejemplo pasear por sus jardines y dirigirse al Shuttle Launch Experience (SLE), un espacio temático dedicado a contar la experiencia de un despegue de una lanzadera espacial. Aquí se encuentra una réplica a tamaño real de una lanzadera, la cual se puede visitar en sus diferentes niveles, ya sea la bodega de carga, la cabina de mando o donde viaja la tripulación. Junto a la SLE se localiza, por cierto, la llamada “Plaza de la lanzadera” en la que pueden tocarse tres inmensos depósitos de combustible que sirven para poner en órbita las lanzaderas.

Dentro del SLE el visitante puede sentir directamente la experiencia de lanzamiento vertical. Gracias a imágenes, sonidos y sensaciones, provocados por un simulador, y una vez abrochados debidamente los cinturones de seguridad, la experiencia es muy real. Todo parece llevar al visitante al espacio.

Otra buena opción es acercarse al complejo Astronaut Memorial, una plaza dedicada a todos los astronautas que han ido al espacio, especialmente dedicada a aquellos que han dado su vida en la exploración espacial.
Y desde allí se accede a uno de los cines Imax, donde se exhiben diferentes producciones en 3D relacionadas con diferentes momentos de la aventura espacial.

Por ejemplo la oportunidad de ver una película sobre la aventura del hombre en la Luna y otra sobre la Estación Espacial Europea. Impresionante también es el Rocket Garden o Jardín de los Cohetes, donde se exponen diferentes modelos de cohetes que Estados Unidos ha puesto en el espacio.

Esta es una de las zonas más interesantes del complejo donde podemos ver con toda su grandiosidad los cohetes que han participado en la conquista y exploración espacial, como es el caso de los cohetes Mercury-Redstone, Mercury-Atlas, y Titan II que llevaron astronautas al espacio y los cohetes Juno I, Juno II, Thor-Delta, y Atlas-Agena fueron los encargados de enviar satélites al espacio desde Cabo Cañaveral.

Junto a ellos se encuentra el cohete más grande construido el Saturno V, utilizado para el lanzamiento de las capsulas Apollo, los módulos Skylab ademas de utilizarse en el proyecto conjunto con Rusia Apollo-Soyuz.

En las proximidades de este Jardín, se sitúa el edificio de las Exploraciones Iniciales del Espacio, donde es posible observar las auténticas consolas de control de las misiones Mercury, los primeros artefactos espaciales, que es como entrar en la prehistoria de la aventura espacial.

Pero quizá uno de los momentos más emocionante que se pueden tener visitando el KSC es acercarse al denominado “Punto de encuentro con astronautas”, en el Complejo de Visitantes, un enclave donde el visitante tiene la oportunidad de conocer, hablar e incluso comer con alguno de los verdaderos aventureros del espacio, astronautas profesionales que han estado en el espacio.

Desde el Complejo de Visitantes hay también la posibilidad de hacer un recorrido por los diferentes lugares del Kennedy Space Center restringidos al gran público. Estos recorridos se realizan en un autobús, que hace una serie de paradas en torno a edificios operativos de la NASA como es el caso de la torre de observación del “Complejo de Lanzamiento 39”, desde donde se observan las plataformas de lanzamiento que tantas veces se han podido ver en televisión cuando despegaban las diferentes naves con destino al espacio.

Junto a la torre de observación se encuentra aparcada la inmensa plataforma oruga que se utiliza para llevar los cohetes hasta las plataformas de lanzamiento.

Una parada obligatoria para el visitante  es el Edificio de Ensamblaje de Vehículos, donde en los años sesenta y setenta se montaban y preparaban las diferentes naves antes de ser lanzadas al espacio. Como muestra de su gran tamaño, cabe citar que la bandera de los Estados Unidos que preside una de sus paredes es más grande que la cancha de Baloncesto de Los Angeles Lakers.

Otra de las paradas del recorrido nos lleva al Centro Apollo/SaturnoV, Este edificio se encuentra dedicado exclusivamente al proyecto Apollo, y la llegada del hombre a la Luna, el centro cuenta con un cohete Apollo de 111 metros de longitud, dividido en las fases que se iban separando durante su ascensión al espacio. Junto a él podemos observar un Módulo Lunar como los que se utilizaron para alunizar en la Luna, además de uno de los vehículos Rover que utilizaron los astronautas para moverse por nuestro satélite. Dentro del centro está la reproducción de la sala de control utilizada durante las misiones Apollo, además de la capsula que utilizaron los astronautas en la misión Apollo XIV.

El Programa Apollo comenzó en julio de 1960 cuando la NASA anunció un proyecto, continuación de las misiones Mercury, que tendría como objetivo el sobrevuelo tripulado de nuestro satélite para localizar una zona apropiada con vistas a un eventual alunizaje de astronautas; se cumpliría así el viejo sueño del viaje a la luna por parte del ser humano.

Pero los planes iniciales se vieron modificados en 1961 con el anuncio del presidente John F. Kennedy de enviar un hombre a la Luna, y traerlo de vuelta a salvo antes de que finalizara la década. La meta se alcanzó con 17 meses de margen, cuando el 20 de julio de 1969 Neil Armstrong y Edwin Buzz Aldrin a bordo de la Apollo 11 alunizaron en el Mar de la Tranquilidad.

El Proyecto Apollo fue uno de los triunfos más importantes de la tecnología moderna. Seis misiones lograron posarse sobre la superficie lunar con un solo fallo: la misión Apolo 13 no pudo cumplir su meta por la explosión del tanque de oxígeno líquido del módulo de servicio, pero la tripulación regresó a salvo. Previamente a las misiones con descenso proyectado a la superficie de la Luna, se probaron los sistemas de vuelo en varios lanzamientos automáticos y después hubo dos pruebas tripuladas en órbita terrestre (Apollo 7 y 9) y dos misiones sólo orbitales (sin alunizaje) a la Luna (Apollo 8 y 10). En 1973, una vez finalizado el programa lunar, tres naves Apollo fueron usadas para enviar tripulaciones a la estación espacial Skylab y en 1975 fue lanzada la última nave Apollo, para la misión Apollo-Soyuz.

Dentro de estas instalaciones hay algunos de los trajes espaciales que se utilizaron en diferentes momentos de la exploración lunar, y en un teatro de la “Sala de Lanzamientos” se recrea el lanzamiento del Apolo 11 además de la llegada del hombre a la Luna.

Para finalizar la visita al Kennedy Space Center, y antes de regresar al “Complejo de Visitantes”, es conveniente entrar en la International Space Station Center, donde aún hoy se desarrollan diferentes componentes de la Estación Espacial Internacional que hay permanente allá en los cielos.

Para más información: www.KennedySpaceCenter.com y en www.NASA.gov