Pietrasanta, del mármol al bronce.

A las faldas de los Alpes Apuanos, a orilla del mar Mediterráneo, al norte de la región italiana de la Toscana se encuentra una preciosa ciudad, poco conocida por los visitantes de la Toscana, me refiero a Pietrasanta. Esta ciudad fue fundada por Giancarlo Pietrasanta,  Magistrado Gobernante de Lucca, en 1255.

Con un esquema octogonal, fue fortificada en el año 1300, posteriormente fue conquistada por Pisa y Génova, y finalmente  paso al control de Florencia, en 1513 bajo el control de León X (Giovanni di Medicci). Quien puso las famosas canteras de mármol de la zona a disposición de Miguel Ángel.

La tendencia artística de Pietrasanta tiene su origen en esta época y aún hoy perdura, siendo el lugar de residencia de muchos artistas y artesanos. Es difícil, y quizás imposible, encontrar otro lugar como Pietrasanta, en el que se encuentren concentradas tantas expresiones artísticas diferentes.

A lo largo de los siglos al trabajo del mármol se le han agregado nuevas actividades artísticas como el mosaico, la marquetería, el grabado, la cerámica y el forjado del hierro y el bronce  entre otras.

Aprovechando nuestro viaje a la Toscana y disfrutando de esta preciosa ciudad nos hemos acercado a dos  de las más importantes industrias artísticas de la población.

La Fundición Artística Mariani es, sin lugar a dudas, uno de los referentes mundiales en el trabajo de la fusión y fundición de metales, fundada en 1952 por Claudio Mariani hoy en día  es el centro de trabajo de alguno de los creadores más importantes del mundo, como es el caso de Fernando Botero, Lorenzo Queen, Eric Goulder entre otros.

En esta fundición se realiza el proceso completo de elaboración y creación de las obras artísticas. El autor viene con el boceto de su creación, y un grupo de artesanos comienzan con el trabajo de elaboración de la obra.

El proceso comienza con la creación de una copia en cera del modelo presentado por el artista.

Esta copia se cubre con una fina capa de cerámica que capta todos los detalles de la superficie de la obra, una vez superado este  paso la cera se extrae en un horno.

El siguiente paso es uno de los más espectaculares, pues en el “negativo” cerámico se vierte la colada  metálica, en este caso era bronce a 1400 grados de temperatura.

Una vez enfriada la obra, esta se desmonta de su “carcasa” cerámica, y es enviada a los artesanos encargados del montaje y pulido, siempre suele hacerse bajo la supervisión del artista.

Hay que reconocer que ver todo el proceso de elaboración fue un privilegio, y esta es una visita muy recomendable.

La siguiente parada la hicimos en el estudio y taller del marmolista Massimo Galleni, uno de los más importantes representantes del trabajo artístico el mármol. Con más de 20 años de experiencia en el trabajo del mármol, y siguiendo las técnicas de los artistas clásicos, en el estudio de Massimo Galleni se realizan obras escultóricas clásicas, religiosas, ornamentales, funerarias y esculturas modernas.

Para terminar nuestra breve vista a Pietrasanta recomendamos acercarnos a sus bonitas playas y por supuesto no podemos irnos sin visitar el casco antiguo de la ciudad donde destaca la Chiesa della Misericordia, que alberga frescos de Botero, El Duomo di San Martino de 1256, y la iglesia del SXIII  Chiesa di Sant’Agustino, que después de haber sido desacralizada se utiliza como incomparable marco para la realización de exposiciones  de arte.

Más información www.pietrasanta.it, www.artigianart.it, www.fonderiamariani.com, www.gallenimassimo.it

Que leer: Guía de Lonely Planet, Toscana y Umbría. GeoPlaneta.