Cómo preparar profesionalmente un viaje fotográfico a lugares remotos

La  fotografía  es  solo una  excusa para adentrarse en el mundo del “otro”. A veces, intentando convertise -por poco tiempo-  en el otro.

1.- Haz tus deberes . Un viaje internacional a un lugar exótico, sobre todo si vas en solitario, suele ser una gran inversión.

Si decides  ir en solitario o unirte a un grupo necesitas saber a donde vas y con lo que te puedes encontrar. Cuándo ir.  Qué festivales hay en diferentes épocas del año, monzones, calor,  Problemas con las carreteras por las lluvias, etc..

A veces me lleva más de un año programar adecuadamente un viaje. La realidad es que algún itinerario y destino lleva gestándose más tiempo.  Muchos de ellos requieren permisos. Además suelo recopilar información de otros viajeros y fotógrafos y, en muchas ocasiones, correspondencia en la que intercambiamos experiencias en el destino.  Ello hace que cuando estás en el lugar puedas afinar  más la puntería y dediques  tu tiempo a estar con la gente o en el lugar en vez de perderlo buscando tu destino.

El rincón de Harry

2. Elige a tu acompañante,  guía u organización.- La elección de la persona o la organización  que te va a llevar a la expedición es quizás la más importante del viaje,  ¿Tiene experiencia con fotógrafos? ¿Cómo se mueve con la gente? ¿ Y con las autoridades (policias, militares)?  ¿Puede solucionar los imprevistos que, previsiblemente ,  se van a producir? ¿Sabe de verdad lo que dice saber?

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3. Programa de antemano lo que pretendes – fotográficamente- del viaje.

Recuerdo que  en una de  los viajes con Nomad Expediciones Fotográficas en  el desierto del Kutch, hice un reportaje sobre los trabajadores en las minas de sal y.. ¡se me olvidó fotografiar el producto final : la sal!

¡Tuve que volver al día siguiente únicamente para  hacer la foto de  una trabajadora sujetando la sal en sus manos... Perdí toda una mañana para una sola foto...

¿Es un reportaje personal? ¿Quieres tener una variedad de fotografías para un posible uso profesional?  Lo ideal es anotar  previamente lo que pretendes en cada una de las localizaciones a las que vas. Recuerda tomar fotos verticales y horizontales, primeros planos y generales. Algo que permita contar la historia.  La emoción del momento nubla la vista y te encuentras muchas veces que no hiciste la toma soñada. Solo te das cuenta después, en tu país, cuando la cosa ya no tiene remedio.

4.- Anota lo que has hecho y guarda direcciones y teléfonos. Mejor con una foto que te permita recordar la situación y la persona. Si piensas usar las fotos con personas, no viene mal tener unos mini-contratos (mejor en el idioma nativo, además del universal inglés) . Grandes medios de difusión como National Geographic, no aceptan fotos si no les aportas la autorización escrita de la persona que aparece en la misma.

5. Organízate. No pases todo su tiempo frenéticamente buscando cosas en la bolsa.

No hay nada más estresante que estar en una conexión en un aeropuerto indio, sin tiempo para tomar el avión siguiente y encontrarte con un aduanero que quiere que saques todo el material que  luego tienes que volver a poner , a toda prisa,  en su sitio. Es la mejor forma de perder el cargador o el cable de cargador.: un desastre.

Organiza  la  bolsa de forma que cada cosa tenga su lugar y que vuelva todo al mismo sitio.  Suelo poner los cables y pequeños accesorios en bolsas de plástico transparente , lo que me permite ver lo que llevo y, además, en las aduanas que el aduanero pueda verlo sin descolocarme todo.

6. La copia de seguridad es lo que más vale de tu viaje

Irse al fín del mundo, pasar días de carretera, calor, subir, bajar. Dormir mal. .. Todo compensa cuando has hecho la foto soñada o las fotos soñadas.  El auténtico desastre es encontrarte a mitad o final del viaje con que tu tarjeta de memoria (esa que nunca se estropeado) no funciona o que, quién sabe cómo,  al cambiar de tarjetas, dejaste una en un bar de carretera.

Siempre llevo una cartera de tarjetas de memoria  en mi cinturón en la que tengo las que no he usado y las usadas.  Diariamente (al menos una vez al día) realizo copias de seguridad ya sea en un “back-up” portátil , ya en un ordenador portátil.   La tarjeta original usada la guardo. De este modo tengo dos copias de todo. Una de ellas la llevo conmigo y otra se la suelo entregar  a mi conductor, guía o acompañante.

7. El té es esencial. Aprende de tu entorno al llegar a un destino desconocido

Tómate un té. Su valor es incalculable para un fotógrafo.

En Kawda, cerca de la frontera con Pakistán,  me encontré en un tugurio con autóctonos poco dados a congeniar con un desconocido. De hecho me indicaron claramente “No Foto”. Después de treinta minutos y tres tes nos hicimos amigos. Surgió la oportunidad fotográfica.

Si lo tomas solo permite que la gente te vea y que pueda acercarse a tí, por mera curiosidad. Si estás acompañado, te permite conocer más a  tu acompañante e integrarte en el ambiente.

No hay nada más absurdo que bajar de un coche o autobús, poner la cámara en modo ráfaga y empezar a hacer fotos a todo lo que se mueve...  Cuando llegues al sitio, si puedes, tómate un tiempo para mirar a tu alrededor, respirar el ambiente, hacer contacto visual. Si puedes, espera una luz adecuada, no te empeñes en hacer fotos a las 12 del mediodía con un sol de justicia.

Check List.

-  Escoge el destino, la época e información sobre el lugar

-  Busca el guía / Fotógrafo que pueda facilitarte la vida y señalar localizaciones

-  Programa tus futuras fotos. Hazte un guión. Busca un propósito a tus imágenes.

-  Anota tu día a día y guarda direcciones y teléfonos. Nunca se sabe.

-  Organiza tu equipo para que sea accesible fácilmente.

-  Cuenta siempre con copias de seguridad de tus fotos

--No te abalances a “capturar” fotos. Tómate tu tiempo.

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